Los interruptores diferenciales de 2 y 4 polos se usan para proteger a los usuarios de una instalación eléctrica monofásica contra fugas de potencia accidentales que podrían resultar en lesiones graves e incluso la muerte por electrocución.
Este mecanismo comprueba continuamente que la corriente que entra por la fase es exactamente la misma que sale por el retorno (neutro). En caso de que exista una diferencia se corta la alimentación evitando daños mayores.
Si en algún momento una persona (o mascota) toca un conductor mal aislado o un electrodoméstico con una conexión eléctrica defectuosa, la electricidad sale del circuito y se deriva a través de él causando una diferencia suficiente para activar el diferencial sin causar daños.
Para una mejor protección, la instalación debe contar con una conexión de toma de tierra adecuada.
En caso de que al enchufar o encender un electrodoméstico se active el diferencial, deberá retirar el electrodoméstico de la toma de potencia antes de rearmar el interruptor diferencial, y debe enviar este aparato a un servicio técnico para su revisión.
En algunos casos extraordinarios el interruptor diferencial puede activarse por causas externas al circuito a proteger. Si ocurre cuando no hay una persona que pueda rearmar el diferencial, podría darse el caso, por ejemplo, de dejar una nevera sin potencia durante días, estropeándose su contenido. Si éste es su caso, le recomendamos que instale un interruptor diferencial auto-rearmable.